Hace años me gustaba ir de compras a las plazas, ir de fiestas con mis amigos y frecuentar restaurantes caros. Lo hacía cada fin de semana en la temporada baja de mi trabajo.
Yo ganaba muy buen dinero, pero por alguna manera el dinero no me alcanzaba y terminaba pidiendo dinero a amigos y familiares para poder pagar mi renta o pagar mis gastos y muchas veces saturaba mi tarjeta de crédito para poder ir de fiesta.
Esto lo hice por muchos años. Siempre tuve un vacío en el alma que quería llenar con esa vida y nunca hice algo bueno para mi progreso personal o contribuir a la sociedad. Solo trabajaba para ganar dinero.
Me volví independiente a los 14 años y mi vida no cambió hasta que cumplí 28 años. Así que si hacemos cuentas, desperdicie 14 años de mi vida en una vida mediocre.
Después de los 28 descubrí que mi vida podría ser mejor, pero necesitaba dejar mi vida anterior. Tenía que dejar de frecuentar fiestas, gastar mi dinero, acercarme a Dios, aprender y enfocarme en mi futuro.
Desde entonces, todos los días que despertaba, me preguntaba, ¿Por qué desperté el día de hoy? ¿Cómo quiero que mi futuro se torne…?
Ya no era para divertirme y sentirme vacío. Ya sabía que no quería sufrir en ese momento ni en el futuro. Algo dentro de mí me dijo que la mejor forma de vivir y ser feliz es ayudando a los demás.
Fue así como Custom Body Fitness empezó a ser exitoso. Deje de desperdiciar tiempo y dinero en fiestas, compras, y salidas sin sentido. No es que esto sea malo, pero entre más lo hacía más tiempo me quitaba en mi progreso. Aprendí que toda la gente exitosa tuvo que invertir mucho tiempo en ellos para poder llegar tan lejos.
Ese tiempo, mal invertido, lo empecé a invertir en mi. Digamos que trabajaba 8 horas y dormía 6 horas, eso me dejaba con 10 horas al día para poder invertirlo en mi. Cómo sabía porque despertaba y como quería mi futuro, empecé a invertir todo el tiempo extra que tenía en mi.
Después de seguir invirtiendo tiempo en mí, aprendí que debía priorizar mi vida en lo que más me importa…
Fue donde dividí mi vida en mi crecimiento con Dios, mi familia, mi salud, mi sabiduría, mi carrera y mis finanzas. Empecé a meditar, a leer, aprender, a comer saludable, a escribir, a crear, a preocuparme por los demás, y fue así como mi vida empezó a cambiar.
Había muchas cosas a las cuales no estaba acostumbrado. Por ejemplo, no me gustaba ahorrar, meditar, hablar en público, ser paciente, leer y todo eso que tenía que hacer para mejorar mi vida y mi futuro, pero de todos modos lo empecé hacer.
Empecé a tomar acción en todo lo que aprendía…
No se trataba solo de leer y obtener sabiduría. Se trataba de aprender y aplicar lo aprendido. Así que empecé a hacer las cosas que me atemorizaban. Empecé a contactar periódicos para que publicaran mi artículo. Empecé a hacer seminarios donde daba charlas en público. Empecé a ahorrar dinero e invertir en oportunidades que me salían.
Me acuerdo que aprendí que tan importante es la comida orgánica para la salud. En esos momentos cuando aprendí eso, yo no tenía dinero y estaba en deuda con varias personas. Sabía que lo orgánico cuesta mas caro, aun asi empece a comprar mi comida orgánica. Estaba dispuesto a invertir en lo que más me importa. Así fui mejorando mi vida y empecé a vivir la vida de mis sueños.
Vuelvete exitoso...
Lo primero fue llenar ese vacío que sentía en mi alma, encontré mi propósito y me siento en paz. Eso fue porque me acerqué a Dios. Después finalmente pude tener una relación funcional con mi pareja y ya tenemos una hija. No sufro de enfermedades y estoy en forma a mis 40 años. Mi carrera sigue mejorando y financieramente estoy en una posición muy buena. No tengo que trabajar 40 horas a la semana para poder vivir y hago lo que me gusta que eso es lo que más me importa.
Así que si deseas vivir la vida de tus sueños y tu sueño no es degradarte, empieza a invertir el tiempo en lo que más te importa y deja de hacer las cosas que no te ayudan a mejorar y tu vida cambiara porque tu lo decidiste. Vuelvete exitoso