Dejé de hacer ejercicio porque estaba bajo estrés. Mi esposo se lastimó y no pudo trabajar y yo no pude pagar todas las cuentas. Además, necesitaba cuidarle. Trabajaba doble, llegaba muy temprano al trabajo y llegaba tarde a casa por la noche. Sentí que no podía hacer frente a todas las facturas.
Tuve que ayudar a mi prima. No tenía a nadie cerca y yo era el único en quien confiaba. Terminó en el hospital con un cáncer terminal y sentí que yo era la única con quien podía contar y no podía decepcionarla en sus últimos días. Ella falleció el mes pasado y estoy lista para volver a mi rutina.
Mi hija accidentalmente atropelló a mi esposo y lo lesionó. Él necesitaba atención médica inmediata. Depsues yo necesitaba lidiar con la lesión y la recuperación de mi esposo, y también con el trauma de mi hija, y ayudarla a comprender que fue solo un accidente.
Estaba embarazada y estábamos deseando tener a mi pequeña y cuando no lo esperaba perdí a mi bebé. Afectó a toda la familia y por supuesto a mí. Me tomó tiempo superar la depresión, pero ahora me siento mejor.
Esas son algunas de las historias que puedo contarles que escuché de algunos de nuestros miembros...
Si me siento y me pongo a escribir todos los problemas de mis clientes, estaría escribiendo un libro completo de los problemas que todos enfrentamos en la vida.
Nadie está inmune a los problemas...
A veces no tenemos que lidiar solo con un problema. Por ejemplo, en el primer ejemplo que les di al principio de este artículo, nuestra miembro tuvo que lidiar con la lesión de su esposo, las facturas, la imputación de la pierna de su suegro y los pagos que no llegaban al negocio de su esposo. Parece que hay ocasiones en las que los problemas te esperan en el momento más vulnerable.
Muchas veces cuando sucede este tipo de problemas lo único que podemos pensar es en superar estos problemas...
Pero te recomiendo que no te olvides de tu salud y hagas todo lo que puedas para desetresarte, comer sano y hacer ejercicio.
Si sucede que no puedes hacer ejercicio porque necesitas trabajar el doble para sustentar a tu familia durante un par de meses, al menos come sano y encuentra tiempo para ti a solas para pensar en lo que está pasando y entender que todo estará bien. Dios nunca soltará tu mano.
Y ya que hayas visto la luz y estés dispuesto a cuidar tu salud, hazlo…
No esperes a que todo se arregle a la perfección porque siempre habrá problemas.
No olvides que gracias a tu salud y cordura pudiste superar este tipo de problemas y también debes cuidarte.
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